Déjeme ir, Señor Hill
Capítulo 1095

Capítulo 1095:

Catherine fulminó a Shaun con la mirada durante un rato, pero al final, aun así, lo siguió escaleras arriba.

Puso a Suzie en la cama grande del dormitorio principal.

“Puedes descansar al lado. Yo no dormiré. Me quedaré aquí con ella».

“Olvídalo. Si te dejo aquí, no sabrás qué hacer si vuelve a tener fiebre».

Catherine puso los ojos en blanco.

“Déjame el termómetro. Tú duermes al lado».

«… de acuerdo».

Shaun asintió y se dio la vuelta para salir.

Éste era su dormitorio, así que Catherine no se atrevió a dormir en la cama. Se quedó en el sofá de al lado y envió un mensaje de texto a Wesley: [Tengo que hacer horas extras en la empresa hasta primera hora de la mañana y no volveré esta noche. Lo siento].

Después de enviarlo, le ardían las mejillas de culpabilidad. Se sentía como una mujer que engaña a su marido.

Sin embargo, cuando vio la carita inocente de Suzie, no pudo evitarlo.

Estuvo sentada mucho tiempo hasta que el cansancio la invadió. Se recostó en el sofá y se quedó dormida.

Antes de dormirse del todo, oyó que la puerta de la habitación se abría suavemente. Se despertó inmediatamente, pero no abrió los ojos.

No sabría qué decirle a Shaun si se despertara ahora y, en segundo lugar, no sabía qué planeaba hacer Shaun.

Entonces, el sonido de pasos se detuvo frente a ella y un par de brazos la levantaron.

Rápidamente abrió los ojos y miró a Shaun nerviosa y cautelosa.

“¿Qué haces? Bájame».

“Sólo quería llevarte a la cama. Es tarde. Necesitas descansar».

Los ojos profundos y oscuros de Shaun estaban firmemente clavados en su carita nívea.

“No hace falta. Además… no voy a dormir en tu cama», dijo Catherine con determinación.

“¿Cuántas veces te has acostado ya en mi cama?”.

Shaun levantó una ceja afilada. Aunque intentaba controlarlo, frente a ella, su rostro seguía revelando instintivamente un atisbo de ambigüedad.

La cara de Catherine se calentó al instante y le espetó: «Eso era antes. Ahora tengo marido».

“¿Qué tiene de diferente? Después de casarte con él, ¿No seguías en mi cama en tu noche de bodas?”

Shaun vio como su bello rostro se enrojecía lentamente bajo las luces. Su impresionante aspecto le hizo soltar inconscientemente estas palabras.

“Shaun Hill, ¿Has terminado?»

Catherine estaba muy avergonzada, pero había un niño en la habitación y tenía miedo de despertar a Suzie. Aunque estuviera enfadada, tenía que bajar la voz.

“¿Por qué actúas así cuando ya no puedes hacerlo? ¿No puedes comportarte?» Ella de repente apuntó a su punto débil. El apuesto rostro de Shaun palideció al instante.

Catherine se mordió el labio y de repente se enfadó. Parecía que había sido demasiado brusca. Para un hombre, ésa era su dignidad, pero ella acabó atacándole donde más le dolía.

“Como sabes que ya no puedo hacerlo, entonces no deberías preocuparte por nada. Incluso si quisiera… comer, no sería capaz de comerte”.

Shaun dijo débilmente después de mucho tiempo.

Sus palabras eran demasiado directas, y en la oscuridad de la noche, Catherine todavía se sentía como si hubiera sido agredida sexualmente.

“Pero sigues siendo un hombre…”.

“Ya no soy un hombre”.

Shaun la interrumpió.

Catherine no podía hablar de repente.

Le miró y parpadeó. Observando el aspecto abatido y estoico del hombre, de repente no supo qué decir.

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