Cuando sus ojos se abrieron
Capítulo 892

Capítulo 892:

El corazón de Elliot se hundió mientras miraba su teléfono después de que Avery colgara.

No era que estuviera molesto por haber sido regañado por Avery, sino por el hecho de que alguien le había enviado rosas. Si el ramo era de Mike o Eric, habrían firmado la tarjeta; así que ¿Quién era? ¿Quién estaba tratando de perseguir a Avery en secreto?

«¡Los demás continúen!» dijo Elliot, antes de salir furioso de la sala de reuniones.

Les dijo a los gerentes que siguieran adelante y se fueran, cuando las reuniones programadas para el lunes estaban destinadas a que los demás se presentaran ante él; ¿A quién más se suponía que debían presentarse con Elliot fuera?

Elliot fue directamente a su despacho y cerró la puerta tras de sí después de salir de la sala de reuniones.

Su secretaria se quedó delante de la puerta, con los ojos rojos y aterrorizada. Era la primera vez que cometía un error tan horrible en los años que llevaba trabajando allí. Aunque el café no estaba hirviendo, se había derramado por todo el teléfono, la mano y la ropa de su jefe.

Aunque Elliot aún no la culpaba de lo sucedido, ella sentía que la castigaría en cuanto se diera cuenta de lo ocurrido.

«¿Qué pasa?» Pasó Chad y preguntó al ver la expresión de la secretaria.

La secretaria le explicó a Chad todo lo sucedido en la sala de reuniones. «El Señor Foster aún no me ha castigado porque su mente está ocupada por lo que le dijo Avery. Una vez que se calme y vea su ropa sucia, me castigará sin duda», dijo la secretaria con culpabilidad, «Envidio a la Señorita Tate. Si fuera ella la que cometiera el mismo error que yo, incluso podría culpar al Señor Foster de haber provocado el derrame del café teniendo en cuenta su temperamento.»

Chad no pudo evitar reírse. «No me parece que esté asustada en absoluto, ya que sigues siendo lo suficientemente valiente como para hacer bromas sobre esos dos».

«Estoy en shock por lo que la Señorita Tate hizo, ¿De acuerdo? No esperaba que fuera tan dominante y grosera cuando hablaba con el Señor Foster». La secretaria bajó la mirada.

«¡Muy bien, vuelva al trabajo! Te ayudaré si el Señor Foster realmente intenta castigarte más tarde. Después de todo, no lo hiciste a propósito».

«¡Gracias, Chad! Te deseo suerte en tus relaciones románticas. ¡No te vuelvas tan rastrero como el Señor Foster en su relación!» Dijo, antes de volver corriendo a la oficina de la secretaria.

Chad sacudió la cabeza y suspiró.

Efectivamente, Elliot estaba actuando con bajeza; pero era necesario teniendo en cuenta que Avery tenía tres ventajas sobre él. Si Elliot no se reconciliaba con Avery, no podría acercarse a los tres niños.

Naturalmente, Chad creía que Elliot seguiría esforzándose por conquistar a Avery aunque no tuviera esos tres hijos. Había innumerables mujeres en el mundo y muchas estarían dispuestas a envejecer con Elliot, pero la única que él quería era Avery.

Chad llamó a la puerta del despacho del presidente y entró para encontrar a Elliot al teléfono.

«Llámala y pregúntale, o pregúntale al vicepresidente de su empresa». Elliot se dio la vuelta con el teléfono en la mano y se lo entregó una vez que divisó a Chad.

Chad ya había adivinado con quién estaba hablando y de qué estaban hablando, así que aceptó el teléfono y se aclaró la garganta, antes de decir: «¿No trabajas hoy?»

Mike se despertó al instante al oír la voz de Chad y dijo: «¿No te lo he dicho ya anoche? Avery me dijo que descansara en casa».

«¡Pensé que estabas bromeando! Avery ha recibido hoy un ramo de rosas. Ve a averiguar quién lo ha enviado y llámame en cuanto encuentres algo».

«No hay necesidad de eso. Vi los mensajes en nuestro grupo de chat», dijo Mike con pereza, «Nuestro vicepresidente lo envió como representante de todos los empleados. Podría morirme de risa. ¿Se ha asustado Elliot? Sonaba tan amargado cuando hablaba conmigo justo ahora…»

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