Cuando sus ojos se abrieron
Capítulo 832

Capítulo 832:

Avery miró el brillante anillo de diamantes que llevaba en la mano. Sus ojos se humedecieron. No pudo controlar sus emociones. Corrió a sus brazos y lo abrazó con fuerza. «¿Desde cuándo has comprado el anillo? Hemos estado juntos todos los días. No me di cuenta de que habías preparado un regalo de antemano».

Avery pensó que no sabía que ese día era San Valentín.

Desde la mañana hasta el momento en que ella le recordó que era San Valentín, no se mostró extraño ni se comportó fuera de lo normal.

«Cuando te compré el collar, también eché un vistazo a los anillos», explicó Elliot, «es difícil no saber qué día es hoy».

Hace unos días, las promociones de San Valentín empezaron a tener lugar. Esta mañana, todas las noticias relacionadas con el Día de los Enamorados le llegaban a su teléfono.

«Si no hubera mencionado el día de San Valentín justo ahora, ¿Cuándo pensabas darme el anillo?» Avery le soltó. Miró su apuesto rostro con los ojos enrojecidos.

Elliot la miró cariñosamente. Dijo con voz ronca: «Sé que me lo recordarás. Lo he estado esperando desde la tarde en que viste tu calendario».

Avery se rió, pero también estaba un poco enfadada. «¡No puedes ser más proactivo! ¡Tienes que esperar a que lo mencione!»

«Yo tomé la iniciativa de poner el anillo en tu dedo. ¿No cuenta eso?» Le cogió la mano con las palmas. «Avery, ¿Qué es lo siguiente?»

Avery miró a la gente de la calle con la felicidad en sus rostros. Ella sonrió y dijo: «Así de fácil. Vamos a dar un paseo».

Quería que todos los que estaban en la calle la vieran con un anillo y un ramo de rosas en los brazos, agarrada también al hombre que más amaba.

Quería decirle al mundo que era la mujer más feliz del mundo.

…

En Avonsville, Chad trasladó a su madre al mejor hospital para su tratamiento. Cuando Ben recibió la noticia, acudió inmediatamente al hospital para visitar a Tanya.

Tanya ya ha vuelto en sí, pero no estaba en un buen estado mental.

«Ben. ¿Por qué mi hijo se ha vuelto así?» dijo Tanya con lágrimas en los ojos. «¿Su jefe sabe de esto? Quiero buscar a Elliot para exigirle una explicación».

Chad se puso a su lado. Quería explicárselo, pero Tanya se negaba a escucharle. Tenía miedo de que se agitara demasiado y hablara fuera de lugar, lo que no haría más que deteriorar el estado de Tanya.

Ben le dirigió una mirada, pidiéndole que no hablara Chad se dio la vuelta y respiró profundamente.

Ben tomó las manos de Tanya y la consoló: «Tía Tanya, este es un asunto privado de Chad.

Aunque Elliot es su jefe, sólo podía ocuparse de los asuntos del trabajo».

«¡Chad me lo ha contado todo! Ese Mike trabaja para Avery Tate. No hace falta que me cuente la relación de Avery con Elliot. Mi hijo salió así, ¡Elliot tiene que asumir la responsabilidad!» Tanya apartó las manos de Ben.

Ben dijo: «¿Qué quieres que haga Elliot? ¿Que separe a Chad y a Mike? Tía Tanya, ¿No tienes miedo de que Chad te odie?».

Tanya se burló. «Nunca he dicho que no puedan gustarle los hombres. Hay tantos hombres en este mundo. ¿Por qué tuvo que elegir a un extranjero? Ese hombre no parece serio. Si Chad te eligiera a ti, no estaría tan enfadada».

Ben estaba desconcertado. Nunca pensó que se vería envuelto en esto. ¡Chad también estaba desconcertado! ¿Cómo podía su madre decir cosas tan extrañas y absurdas?.

Justo cuando Chad y Ben estaban tan aturdidos que se quedaron sin palabras, Tanya dijo algo aún más chocante: «¡Si Chad estuviera con Elliot, tal vez incluso lo alabaría por sus habilidades para seducirlo!» Chad no se atrevió a taparle la boca a Tanya, por lo que sólo pudo apartar a Ben de la sala.

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