Capítulo 1380:

El guardaespaldas se rascó la cabeza: «Yo tampoco lo entiendo. Avery está teniendo una inspección hoy…»

Elliot: «¿Dónde está Xander?»

«No lo sé. Quizá esperando el resultado». El guardaespaldas es sólo un ladrillo, Xander le deja hacer lo que hace.

«¿Ya has comido?» Preguntó Elliot.

El guardaespaldas negó con la cabeza: «Estoy aquí para vigilar a mi jefa».

Elliot dijo: «Entonces ve a cenar. Yo la vigilaré aquí».

El guardaespaldas, «¡Oh! ¿Has comido? ¿Quieres que te traiga algo?»

Elliot dijo: «Ya he comido. Ve tú».

«De acuerdo». Cuando el guardaespaldas terminó de hablar, Elliot salió de la sala. Se sentó en la silla junto a la cama del hospital. Mirando el rostro pálido y dormido de Avery, Elliot tuvo la sensación de que ya no estaba viva.

Su gran palma no pudo evitar cogerle la mano. Su mano estaba ligeramente fría, pero sus dedos se movían ligeramente cuando Elliot sostenía la suya.

Avery sigue viva, tras confirmarlo, Elliot se sintió mucho más aliviado. Retiró la mano y miró la mesita de noche.

Había algunas frutas en el mueble, así como su bolso.

Por alguna razón, cuando Elliot vio su bolso, su corazón se contrajo de repente, como si viera a un viejo amigo que no había visto en mucho tiempo.

No pudo evitar coger el bolso y abrirlo.

Había pañuelos de papel en su interior, un pequeño frasco de alcohol desinfectante y un paquete de bastoncillos de algodón… Avery era tan diferente de las demás mujeres ya que no había maquillaje en el bolso. Cuando Elliot estaba a punto de cerrar el bolso, de repente vislumbró algo en el centro de la bolsa.

Abrió la entretela y sacó un papel.

Desplegó el papel y vio que su letra estaba en él.

En él estaban escritos los números de sus cuentas y sus contraseñas.

Miró la nota, con la manzana de adán rodando de arriba a abajo.

Esto es lo que le escribió a ella.

Si no la hubiera amado profundamente y no hubiera confiado en ella, no le habría contado toda su intimidad.

De repente, Elliot pensó que Avery le había escrito las contraseñas de varias cuentas en un bloc de notas hacía tiempo. Resultó que él también le había dicho a Avery las contraseñas de sus cuentas.

Justo cuando Elliot estaba en trance, sonó el teléfono que Avery puso sobre la almohada.

Elliot volvió a poner inmediatamente la nota que tenía en la mano en la entretela del bolso y volvió a colocarlo en el mueble. Cuando dudó en contestar el teléfono para Avery, ésta abrió los ojos de repente y se despertó.

Cuando Avery vio a Elliot sentado junto a la cama, la sorpresa brilló en sus ojos de color albaricoque.

«¿Por qué estás aquí?» Avery se despertó de la anestesia, incapaz de distinguir la hora y el lugar del día y la noche durante un rato.

«Tu guardaespaldas se fue a cenar». Elliot señaló su teléfono: «Tu teléfono está sonando». Avery cogió el teléfono y atendió la videollamada.

Se escuchó la delicada voz de una niña: «¡Mamá! ¿Por qué estás enferma otra vez? ¿Te duele algo?».

Layla se enteró de la enfermedad de su madre, y su angustiada madre se sobrepuso a su enfado por no verla en casa.

«Mamá se curará con una operación». Avery levantó la comisura de los labios y cambió de tema: «¿Vas a empezar el colegio? ¿Te lo has pasado bien este verano? ¿Has terminado los deberes de verano?».

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Nota de Tac-K: Tengan un excelente día, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔO‿=)ɔ ♥

Nota 2 de Tac-K: Gracias especiales a Marisela Escamilla por suscribirse, como siempre, aprecio mucho el apoyo n.n

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