Cuando sus ojos se abrieron – La historia de Haze Foster
Capítulo 454

Capítulo 454: 

«¡Primero será mejor que hables bien con ella! Si no sabes cuánto darle de una vez, entonces dáselo mensualmente. De todos modos, tienes que asegurarte de que ya no vivirá en la pobreza». Avery: «Si no, cuando el bebe crezca, ¡Qué duro deberá de ser ver a su madre sufrir tanto!».

Hayden: «Mamá, si el bebe nunca ha estado con su madre biológica, no tendrá sentimientos por él. ¿Crees que papá siente algo por su madre biológica?».

Avery: «…»

Hayden: «¡Mamá, baja al bebé! ¿No estás cansada de tenerlo en brazos todo el rato?».

Avery: «No pasa nada. Ahora no duerme, así que puedo abrazarle y jugar. Si no, ¡Sería tan aburrido estar tumbada todo el rato!».

«¿No hay un cochecito de bebé? Puedes comprar un cochecito de bebé». Hayden abrazó al bebe y supo que en realidad pesaba bastante.

Está bien sostener al bebe por un tiempo, pero si lo sostenía todo el tiempo, definitivamente le dolerían los brazos.

«¡Bueno, hoy voy a salir con tu padre y tengo que comprar muchas cosas!». Anoche, cuando Avery y Elliot dormían en la cama, ninguno de los dos podía conciliar el sueño.

Los dos querían darle a su nieto una identidad oficial, y tenían que comprarle un montón de cosas.

Lástima que aún no le hubieran sacado el nombre, así que no había manera de rellenar el certificado de nacimiento del bebe.

«Puedes hacer una lista y pedirle al conductor que lo compre». Hayden quería que sus padres no estuvieran tan cansados.

Los dos no durmieron bien anoche, y si iban de compras durante el día, su salud podría no soportarlo.

«Tienes que comprar cosas para el bebe tu también. Puedes ir a ver a la madre del bebe con tranquilidad. Debes contener tu temperamento. ¿Sabes lo difícil que es concebir y dar a luz? Ha dado ha luz sin rechistar, de verdad que es muy raro». Al decir esto, Avery cambió repentinamente de tema: «¿Por qué no voy contigo? Tengo miedo de que no hables y la hagas enfadar».

Hayden: «Mamá, iré yo solo. Eres tan habladora que me da miedo que la otra parte hable demasiado alto. Yo no le pedí que diera a luz a este bebe. Puedo compensarla por su duro trabajo. Además, me lo ha estado ocultando. Estoy muy descontento».

Avery: «¡Quizás no quería ocultártelo, pero no podía contactar contigo!»

«Entonces, ¿Cómo puede enviar al bebe a nuestra casa con precisión? No sé qué pasa por su cabeza». Esta era la razón por la que Hayden quería reunirse y charlar con Joanna.

«De todos modos, sé un poco más educado cuando hables con ella. No la asustes». Después de que Avery le diera instrucciones a Hayden, al ver que Elliot terminaba su desayuno, se dispuso a salir.

«¿Está abierto el centro comercial tan temprano?» Hayden miró la hora.

Sólo eran las siete y media.

Era imposible que el centro comercial abriera tan temprano en invierno.

«Vayamos primero al hospital». Avery respondió: «Lleva primero al bebe a que le hagan un examen físico. Por cierto, tienes que tomarte tiempo para pensar en el nombre del bebe».

Hayden: «Mamá, ¿Estás segura de que el bebe es mío?».

«Vas a ver a la madre del bebe, ¿Aún no estás seguro?». La réplica de Avery dejó a Hayden sin palabras.

«¡Puedes elegir el nombre del bebe!». Hayden no sabía cómo llamar al bebe. Nunca pensó que tendría un hijo a una edad tan temprana.

«¿De verdad no quieres ponerle nombre a tu hijo?». preguntó Avery, «Puede que sólo tengas este hijo en el futuro…».

«Mamá, no sé cómo tomármelo». A Hayden no le importaba el bebe en absoluto, «Tú tienes más experiencia».

«Tu padre realmente quiere ponerle nombre al bebe». Avery dijo: «¿Quieres que tu padre lo elija? Si no te gusta, lo haré yo».

Hayden sabía que su madre tendría cuidado, así que asintió.

Después de que sus padres sacaran al bebe, Hayden se sentó en el salón y esperó a que Joanna lo localizara.

Este tipo de espera le atormentaba mucho.

A juzgar por la información obtenida hasta el momento, la otra parte era relativamente pobre, y su discurso era bastante organizado, además la otra parte conocía su identidad desde el principio, y parecía que la otra parte no tenía intención de molestarle.

Antes era periodista, pero ahora trabajaba en una tienda de postres. Se veía que era realmente pobre.

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