Atraído por mi mujer de mil caras -
Capítulo 1007
Capítulo 1007:
Permanecía tranquilo en cualquier situación, como si nada pudiera perturbarle.
Le hizo pensar que era el tipo de hombre que mantenía su corazón encerrado, sin permitirse nunca amar de verdad a alguien.
Finalmente, rompiendo el silencio, Everett dijo: «Marissa, por favor, no dudes de lo que siento por ti.
Puede que no siempre encuentre las palabras adecuadas, pero comprendo profundamente mis emociones.
Cuando me comprometo con alguien, es a largo plazo».
Antes de que Marissa pudiera responder, él prosiguió con determinación inquebrantable.
«Mi amor por ti no es algo pasajero.
Llevo diez años cuidando de ti.
Mis sentimientos han crecido durante ese tiempo, y nada puede cambiar eso.
Aunque esos niños hubieran nacido de un matrimonio tradicional entre Connor y tú, eso no cambiaría lo que siento.
Sólo me culpo por no protegerte mejor, por dejar que Connor se acercara cuando debería haber sido yo.
𝑵uevas 𝓷ov𝒆𝓁𝒶𝓈 en NovelasFree.org.com.
Eso es culpa mía, no tuya.
Déjame asumir ese peso.
No te preocupes por los niños.
Si quieres criarlos, estoy dispuesto a ser su padre».
Las sinceras palabras de Everett dejaron a Marissa descolocada.
Empezó a reconsiderar su impresión inicial de él.
Tal vez el exterior tranquilo que mostraba sólo ocultaba un corazón más amable y cálido en el fondo.
Ese pensamiento la carcomió, llenándola de culpa.
Tras una breve pausa, respiró hondo y dijo: «Pero hay algo más que debes saber, Everett.
Podría cambiarlo todo».
«Por favor, dímelo», dijo Everett con suavidad.
Marissa se removió en el asiento, su malestar era evidente.
«Podría tener algo más que estos dos hijos.
Podría haber otros niños, con padres distintos e historias distintas…».
Miró a Everett y notó que su ceño se arrugaba: sus palabras le estaban afectando más de lo que ella esperaba.
«No he investigado cómo consiguió la organización mis óvulos, cuántos se llevaron, ni si han creado otros niños utilizando esperma de otros hombres…».
Tras mencionar todas las descabelladas e incómodas posibilidades, Marissa se quedó callada un momento.
Luego, con mirada seria, se volvió hacia Everett y le dijo: «Everett, mi futuro es un campo de minas.
Si nos atenemos a este compromiso, te estás apuntando a cosas que ninguno de nosotros puede predecir».
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar